El Estado de Cambio del Patrimonio Neto nace a raíz del Plan General Contable 2007 (efectivo desde enero de 2008) y viene a confirmar la nueva filosofía del mencionado Plan, que aboga en mayor medida por la valoración del patrimonio frente a la obtención del resultado de la empresa.
El Estado de Cambio del Patrimonio Neto se centra en los movimientos que afectan a la financiación propia de la empresa, es decir, aquella que tiene una fuente interna, como son las derivadas del resultado del ejercicio, las propias del Patrimonio Neto, o las provenientes de las operaciones realizadas por los propietarios.