Las actividades del sector de suministro de agua y energía eléctrica fueron las que protagonizaron los mayores incrementos en términos relativos. En concreto se dispararon un 153,57% y un 104,16%, respectivamente. No obstante, en cifras absolutas fue el sector financiero y asegurador quien concentró más del 33% de la inversión, alcanzando un volumen de 2.669,50 millones de euros (un 40,44% más interanual). A banca y aseguradoras le siguió el sector inmobiliario, con 1.554,56 millones de euros de inversión y una caída del 3%, y la construcción, donde se superaron los 1.116,8 millones de euros, un 24,85% más interanual. Cabe señalar que estos tres sectores acumulan el 66,7% del total de las ampliaciones de capital.

En el lado contrario de la tabla, transporte (-55,7%) y actividades sanitarias (-49,99%) son, junto a la hostelería (-42,42%), los sectores donde las empresas invirtieron menos en comparación con el primer trimestre del año 2020.

En el caso concreto de la hostelería, uno de los sectores más afectados por las limitaciones impuestas para controlar la pandemia, las ampliaciones de capital apenas alcanzaron los 139,17 millones de euros, frente a los 241,70 millones de euros de los tres primeros meses.

El comercio, tampoco sale bien parado. Solo se amplió capital por importe de 327,78 millones de euros, 113 millones de euros menos que hace un año (-25,65%).

Por comunidades autónomas, dos destacan por encima del resto. Murcia con un crecimiento relativo del 161,28% y Galicia, donde con un incremento del 194,51%, las ampliaciones de capital superaron los 800 millones de euros. Se coloca así como la tercera región donde las empresas ampliaron más capital por detrás de la Comunidad de Madrid, con 2.799,10 millones de euros, y Cataluña, con 1.695,07 millones de euros.

En cuento a las reducciones de capital, los datos arrojan buenas noticias. Las empresas desinvirtieron un 17,7% menos que en los tres primeros meses de 2020. Destaca también en este caso la caída del 49,47% en el sector financiero y asegurador. Entre enero y marzo se redujeron 1.069 millones de euros mientras que en el mismo periodo de 2020 el volumen ascendió a los 2.117 millones de euros. Es decir, se desinvirtieron 1.048 millones de euros menos.

En términos relativos fueron las actividades sanitarias y las de la construcción las que registraron mayores descensos, un 72,59% y un 57,95%.

Al igual que en el caso de las ampliaciones de capital, el radar demuestra la precaria situación por la que atraviesa la hostelería. Solo en el mes de marzo se redujo un 1.567% más de capital interanual, lo que deja el acumulado con un incremento de la desinversión del 109,18% (133,78 millones de euros).

En el análisis territorial, cabe señalar el incremento de las reducciones de capital en el País Vasco (+463,73%), la Región de Murcia (+275,15%) y en Cataluña (+153,44%). En esta última el volumen alcanzó 1.150,94 millones de euros. Cifra muy por encima de la de la Comunidad de Madrid donde se redujeron 814,19 millones de euros, un 66,65% menos que en el primer trimestre de 2020.