Sin lugar a dudas las empresas españolas se irán de vacaciones el mes de agosto con un ánimo muy distinto al del pasado ejercicio de 2020. La economía empieza a fluir y todos los indicadores apuntan a que la recuperación será más intensa de lo previsto. Al menos de aquí a final de año.
Los datos del Radar empresarial de concursos de acreedores y creación de empresas a cierre del mes de julio, elaborado por el Gabinete de Estudios Económicos de axesor an Experian company, así lo constatan. El frenazo en el crecimiento del número de concursos de acreedores es evidente. Pese a que en los siete primeros meses del año se declararon 3.561 concursos de acreedores, cifra un 57,2% superior a la del mismo periodo de 2020, el ritmo de aumento es 10 puntos inferior al registrado hasta el pasado mes de junio.
Previsiblemente esta mejora se acentuará tras la aprobación del Anteproyecto de Ley de Reforma Concursal, en el Consejo de Ministros previo a las vacaciones de verano, con la que se pretende evitar una oleada de quiebras una vez se cumpla el periodo de vigencia de la última moratoria a final de año. Así, se espera que los planes de reestructuración sean el arnés sobre el que se sostengan muchas empresas españolas para continuar la escalada tras el impacto del coronavirus.
Negocios que, además, se verán beneficiados por la próxima llegada de los primeros 9.000 millones de euros de los Fondos Europeos y que, con toda seguridad y más allá de la inyección de liquidez en las sociedades receptoras, tendrán un efecto indirecto en la economía y el empleo. Dentro de este elenco las empresas del sector agroalimentario deberían tener un papel protagonista. La fortaleza de este sector que, pese a la pandemia, exportó en 2020 un 2,3% registrando un máximo histórico de 54.840 millones de euros, se refleja, también en el número de insolvencias, sólo se han declarado 21 concursos de acreedores en los siete primeros meses del año, cifra que es un 30% inferior a la que se registró en el mismo periodo del pasado año. Un buen resultado que, desde axesor an Experian company, consideramos debería no sólo mantenerse sino ir a mejor, toda vez que ya ha entrado en vigor la prórroga de cinco años relativa a la suspensión de aranceles a las exportaciones a Estados Unidos que afecta a más del 53% de los productos españoles que llegan a este mercado.
Continuando con la línea de las buenas noticias, tras el máximo pre-pandemia registrado a cierre del primer semestre del año, el emprendimiento continúa aflorando brotes verdes que empiezan a arraigarse en la economía real. Hasta el mes de julio se crearon 64.880 sociedades, con un ritmo de crecimiento del 52% que, además, viene acompañado de un aumento de casi el 16% en el capital inicial suscrito, que acaricia los 3.333 millones de euros.
Datos que también deberían mantenerse en línea ascendente gracias a la aprobación del Anteproyecto de Ley de Creación y Crecimiento Empresaria, que permitirá constituir empresas con tan sólo un euro de aportación inicial, disminuir la burocracia y atajar la lacra de la morosidad, que, en la anterior crisis, acabó con la vida de más de medio millón de empresas, la mayoría pequeños negocios.
Dicho lo anterior y siempre bajo el prisma del optimismo, no podemos perder de vista las cifras del comercio y la hostelería, sectores críticos para la economía española y que necesitan con urgencia un agarre que los mantenga en pie y que acumulan el mayor número de procedimientos en lo que llevamos de 2021, casi 1.250 entre ambos. De hecho, a pesar de haber sido las actividades más castigadas por la crisis sanitaria, continúan estando entre las preferidas por los emprendedores. Con crecimientos en el entorno del 50% entre ambas sumaron 19.369 nuevos negocios, o lo que es lo mismo, un 30% del total.