Las sociedades mercantiles españolas captaron en febrero 4.078,5 millones de euros en ampliaciones de capital, una cifra que supone un incremento del 12,9% respecto al mismo mes del año pasado, según los datos recopilados por nuestro Gabinete de Estudios Económicos. Los datos acumulados de enero y febrero se elevan a 8.006,74 millones de euros, una caída del 10,1% comparado con los dos primeros meses de 2015. Las ampliaciones de capital alcanzaron el año pasado un importe de 36.305 millones de euros, la cifra más baja en toda la crisis y la primera vez desde 2010 que esta partida se situaba por debajo de los 40.000 millones de euros. Parece ser que este año, el ritmo es todavía más bajo, lo que podría deberse, en parte, por la mayor facilidad de acceso al crédito, lo que hace menos necesario el recurso a las ampliaciones. Sin embargo, la otra cara de la moneda, las reducciones de capital, han comenzado el ejercicio con mucha intensidad, particularmente por el sector de actividades financieras.
Las reducciones de capital suman en lo que va de año 12.912,71 millones de euros, unos datos que
prácticamente triplican los volúmenes de que se dieron el año pasado por estas mismas fechas. Habitualmente las reducciones de capital suelen registrar volúmenes claramente inferiores a los de las ampliaciones; sin embargo, no fuese ese el caso del mes de
enero, cuando el volumen de las reducciones de capital alcanzó los 10.929,13 millones de euros, debido a 9.013 millones consignados en la parte de actividades financieras y de seguros. Para situar las cifras en su contexto,
basta recordar que el primer ejercicio completo en toda la crisis en el que se superaron los 10.000 millones de euros en reducciones de capital fue el de 2011. En el mes de febrero el volumen fue de 1.983,58 millones de euros, a continuación veremos en detalle en qué comunidades se han concentrado las reducciones de capital.
Las dos comunidades donde el mes pasado se concentraron las reducciones de capital fueron Andalucía, con 789,655 millones de euros y Madrid, con 638,85 millones. En tercer lugar, y a mucha distancia, se situaron Cataluña, con 163,80 millones; Valencia, con 147,104 millones de euros y País Vasco, con 73,866 millones de euros. Es decir, estas cinco comunidades representaron ni más ni menos que el 93,7% de todos los importes de reducción de capital en febrero. Andalucía fue ese mes la única comunidad autónoma donde las reducciones de capital exceden a las ampliaciones.
De esta manera, la lectura de los datos de ampliaciones de capital resulta algo diferente. Madrid es, con mucho, la comunidad más importante en términos de ampliaciones de capital, ya que suma 3.636,79 millones de euros en lo que va de año. Pero a esos importes, se oponen unos datos de reducción de capital abrumadores, 10.020,77 millones de euros. En cambio, Cataluña lleva 1.494,82 millones de euros en ampliaciones, frente a 263,40 millones en reducciones. En Andalucía, por ejemplo, se está reduciendo capital a una velocidad mucho mayor de la que se amplía. Así, los importes canalizados a través de ampliaciones alcanzan los 745,71 millones de euros, frente a los 1.510,57 millones de reducciones de capital. En Valencia y País Vasco, las reducciones de capital alcanzan también niveles significativos. El capital canalizado a través de ampliaciones entre enero y febrero llega 277,45 millones de euros en el País Vasco, pero al mismo tiempo se han drenado del capital social del tejido empresarial 153,70 millones vía reducciones. En Valencia la ecuación es 310,63 millones en ampliaciones, frente a 234,57 millones de euros en reducción de capital.
Por otra parte, muchas ampliaciones de capital tienen como paso previo una reducción de capital, es lo que se conoce como operaciones acordeón, que se realizan cuando la situación de la empresa es de tal gravedad que se hace preciso reducir capital, pero posteriormente se amplía porque aún se tiene confianza en el mantenimiento de la actividad. De hecho, de entre las 100 mayores operaciones de reducción de capital realizadas el año pasado (que sumaron 14.616,90 millones de euros), el importe correspondiente a operaciones acordeón se elevó a 3.802,15 millones de euros, a las que siguió una posterior ampliación de 3.404,45 millones de euros.
En 2015 se realizaron 8.216 operaciones de reducción de capital, que sumaron 21.913,205 millones de euros. Se trató de uno de los mayores volúmenes de toda la crisis, con la excepción del ejercicio 2013, en el que la crisis del sector bancario provocó que las reducciones alcanzaran un récord histórico al sumar 32.328 millones de euros. Los importes registrados en 2014 fueron de 18.630,01 millones de euros.
En conclusión, aunque en muchos sectores se producen importantes movimientos de capital, de igual manera, estos mismos sectores también acumulan importantes reducciones. Es lo que sucedió el año pasado con las actividades financieras y de seguros (6.323,24 millones de euros en reducciones de capital), la construcción (5.860,067 millones de euros) y las actividades inmobiliarias (3.500,97 millones de euros). Estas tres actividades sumaron el año pasado 24.624,80 millones de euros en ampliaciones de capital. Y este año la partida de momento la ganan por goleada las reducciones de capital, algo inusual, pues no hay todavía ningún ejercicio completo en el que al final del año se hayan drenado más importes a través de reducciones de capital, que los que se han movilizado mediante ampliaciones. Las circunstancias que llevan a una empresa a reducir capital son variadas, pero fundamentalmente están relacionadas con el desequilibrio entre capital y patrimonio producido provocado por las pérdidas en las que ha incurrido la empresa, o bien porque el volumen de negocio se ha reducido de tal manera que el capital social resulta excesivo para la actividad que se está desarrollando.
Gabinete de Estudios Económicos de axesor