Empresas españolas asumen importantes costes para obtener suministro eléctrico

El suministro eléctrico es clave para el desarrollo de cualquier actividad empresarial. España ocupa la posición 26 de 34 en el conjunto de la OCDE en cuanto a las dificultades de una empresa para obtener suministro eléctrico, siendo el coste económico el peor factor. Si bien el suministro eléctrico no depende de las Administraciones Públicas en los países más avanzados, siguen siendo mercados con importantes regulaciones y presencia del sector público.

Variables utilizadas

El conjunto de variables de obtención de energía eléctrica aparece por primera vez en Doing Business 2012 y, como es habitual, se hacen supuestos sobre el destino de la acometida:

1. Se trata del suministro a un almacén de 1.300 metros cuadrados, propiedad de una empresa, situado en un polígono no residencial en la principal localidad económica.

2. El local, que se utiliza para almacenar productos refrigerados, es de obra nueva, por lo que se trata de la primera conexión a la red eléctrica.

3. El almacén tiene acceso por carretera y la conexión es de 150 metros de largo para funciones de bajo voltaje.

Las medidas obtenidas a partir de la opinión de empresarios y expertos son: los trámites necesarios (permisos, licencias, inspecciones, contratos), el tiempo en días necesario para todos los trámites (sin incluir el tiempo necesario para obtener información) y el coste de obtención del suministro como porcentaje respecto a la renta per cápita (RPC) del país (sin incluir fianzas).

Coste nulo en los mejores países

En los mejores países de la OCDE, para obtener suministro eléctrico, se necesitan 3 trámites, 17 días y un coste nulo. La mediana de las variables (la mitad de los países se encuentra por debajo) indica que por término medio se necesitan 5 trámites, 85 días para completarlos y tiene un coste del 75% de la renta per cápita. El 25% de peores países requieren, por término medio, 5 trámites, 130 días para completarlos y asumir un coste del 138% de la RPC.

Cuando se crean cinco grupos de países similares, resulta que el mejor está formado por Alemania, Israel, Japón, Corea, Noruega, Suecia, Suiza y Estados Unidos, donde por término medio son necesarios 4 trámites, 54 días y un coste del 26% de la RPC para suministrar electricidad a un almacén de las características descritas.

El segundo grupo, compuesto por Australia, Austria, Chile, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Nueva Zelanda, Polonia, Portugal, Eslovenia y España se diferencia del primero principalmente en el coste. La media del grupo implica pagar un 115% de la RPC para obtener el suministro eléctrico, con un número de trámites y días algo superior comparado con el mejor. Esos costes en España llegan al 232% de la RPC, como los peores países.

El tercer grupo se distingue del primero en mayor medida por la lentitud que por el coste. Lo forman Bélgica, Francia, Grecia, Israel, Luxemburgo, Holanda y Gran Bretaña. Son necesarios más de 5 trámites, y 113 días para obtener el suministro eléctrico, con un coste que representa el 52.7% de la RPC. Los dos últimos grupos destacan por su mayor lentitud y coste. Llama la atención la presencia de Canadá en el peor grupo en términos de tiempo (el quinto), aunque no lo es en coste. Por su parte, Turquía destaca como el peor país para obtener suministro eléctrico de toda la OCDE.

Parece que el mercado eléctrico, fuertemente regulado y con comportamientos cercanos al monopolio, hace que las empresas en España tengan que asumir importantes costes para obtener suministro de electricidad.

Gregorio R. Serrano
Departamento de Fundamentos del Análisis Económico II
Universidad Complutense de Madrid